jueves, 26 de enero de 2006

Las falacias del nacionalismo incívico (II): ¡Vive en churranés!

jueves, 26 de enero de 2006

VIVE EN CHURRANÉS. NO RENUNCIES A TUS DERECHOS

Eslogan hipotético de una a su vez hipotética República de Churrania. Cuando crearon los políticos churraneses este eslogan lograron aunar en una sola frase gran cantidad de falacias. En primer lugar, se usan conceptos ambiguos, ya que no se sabe con certeza que es «vivir en churranés» (¿pasear, comer, follar en churranés, todo...?), ni tan siquiera si lo de en churranés es un derecho y si implica algún tipo de obligación para los ciudadanos (el cumplimiento de los derechos de los ciudadanos solo debe implicar responsabilidades a las instituciones públicas, no a los ciudadanos. Estos deben actuar en libertad dentro de los márgenes más amplios que marque la ley, en otro caso, se trataría de una ley de imposición, es decir, en el caso que nos ocupa, el imponer a un sector de la ciudadanía unas obligaciones para satisfacer unos supuestos derechos de otro sector, sin especificar la reciprocidad para con los primeros), por lo tanto la conclusión a la que se llega «no renuncies a tus derechos» no corresponde con la proposición inicial. Igualmente ocurre a la inversa, es decir, si defiendes tus derechos --> vive en churranés. Es también por tanto un falso dilema, o lo mejor de todo, un magnífico ejemplo de la de la ley del embudo. Además de todo lo señalado, lo más importante es la apelación al cumplimiento de los derechos, con la carga emotiva que esto implica.
Esta ficción, que parece difícilmente superable en la realidad, lo ha sido por los políticos catalanes. A tenor de lo que se puede encontrar en la red, al parecer y haciendo gala de una impresionante habilidad, ¡¡han logrado que se lo subvencionen!!
AntoniMir
si existe el derecho a la sanidad o a una buena alimentación, está también el "derecho legítimo a vivir en catalán"
Si bien este acto fue hace algo de tiempo, las consecuencias se comprueban claramente en la actualidad. Centrándonos en el documento, la equivalencia de esta afirmación del secretario de política lingüística de la Generalitat, Antoni Mir, con la del inicio del artículo es evidente, e igualmente impresionante el alarde de falacia de falsa analogía, además de todas las anteriores. ¿Tienen alguna relación los derechos básicos mencionados con la entelequia de «vivir en catalán»?.
...este idioma tiene que entrar felizmente en todos los ámbitos de la sociedad...
¿Como?, ¿Imponiendolo? ¿Y por qué?, ¿Se menciona que lo reclaman los ciudadanos? ¿Lo necesitan? ¿quien decide lo que necesitan los ciudadanos? ¿Y si no entra «felizmente» que ocurrirá?
hay ámbitos en los que "no ha superado la despenalización"
¿El catalán, está penalizado? ...¿Que quiere decir esto, que hay mas castellano-hablantes?, entonces, ¿Quien tiene la culpa ahora de que el español o castellano lo tengan como lengua habitual un 50% (aprox.) de la población? ¿Cómo se va a despenalizar? ¿Acaso será cuando lo usen obligatoriamente el resto de ciudadanos que no lo utilizan en Cataluña?
"el gran avance" en la difusión del catalán "se debe hacer en el sector privado", porque no es posible que actualmente aún haya comercios o multinacionales incapaces de dirigirse al consumidor en catalán
Análisis:
  1. Asegurar la oferta en catalán en comercios y empresas privadas mediante la implantación de una ley que imponga la utilización de una lengua determinada en detrimento de otra igualmente entendida por los usuarios, es una intervención en el mercado, cosa que podría ser admisible racionalmente si no fuera por que está fuera del ámbito económico, legal y/o de seguridad. Por este motivo es una imposición lingüística que no se corresponde con un deseo de mejora en la calidad del servicio.
  2. Derecho de la ciudadanía. Derecho para unos y obligaciones para otros. Además, el empresario también es un ciudadano. Podría o debería, ofrecer sus servicios en inglés si considerara que tiene la demanda necesaria.
  3. Libertad de elección del ciudadano. Mientras se permita, facilite o incentive a las empresas el escoger cualquier idioma o idiomas, será el ciudadano el que valore este servicio como de valor añadido. El usuario (en términos comerciales) podrá ir a otra empresa si alguna de ellas no ofrece catalán, si lo considera necesario. En definitiva, es el ciudadano el único que puede (o debería) imponer a las empresas (y a los políticos) en función de sus necesidades (teoría básica del marketing o mercadotecnia, y del sentido común). Si existe la necesidad, en un plazo medio, surgirá el servicio y a continuación será imitado por la competencia, si es valorado por los usuarios.
Actualización (02/04/2006): ver comentarios
Hay muchas preguntas por responder y otros hechos más que dudosos. Como comparación, en la Constitución Española de 1978:
Artículo 3
  1. El castellano es la lengua española oficial del Estado. Todos los españoles tienen el deber de conocerla y el derecho a usarla.
  2. Las demás lenguas españolas serán también oficiales en las respectivas Comunidades Autónomas de acuerdo con sus Estatutos.
  3. La riqueza de las distintas modalidades lingüísticas de España es un patrimonio cultural que será objeto de especial respeto y protección.
Como se puede comprobar, la obligación existe, pero únicamente de conocer la lengua española oficial. El ciudadano es libre de usar la que quiera. En el caso de Cataluña, con esta normativa lingüística, no solo se impone el conocerla, sino que también se impone su uso. Es decir, de seguir esta tendencia podría ocurrir que los ciudadanos de la comunidad de Cataluña además del deber conocer las dos lenguas de esta comunidad, español y catalán, estarían obligados a usar este último.
¿Como se puede garantizar este cumplimiento de la imposición de un idioma? Muy sencillo, mediante denuncias anónimas en las Oficines de garanties lingüístiques para denuncias a nivel personal.
¿Y en los medios de comunicación? Igualmente fácil con el organismo censor presuntamente inconstitucional e ilegal en cualquier gobierno democrático, el Consell de l'Audiovisual de Catalunya, ya que se le prevé dotar de capacidades ejecutorias, saltándose por los aires la separación de poderes, y constituyéndose como un Tribunal de Honor:
Artículo 26 Constitución Española de 1978: Se prohíben los Tribunales de Honor en el ámbito de la Administración civil y de las organizaciones profesionales.
Más recursos sobre la imposición del catalán:
Para poder hacer realidad el Vivir en Catalán para voluntarios, existe la página racocatalá. Pero no se quedan en esto, lo cual sería perfectamente admisible por supuesto, sino que tienen foros donde se pretende lograr que los valencianos «volvamos» a hablar nuestro idioma, según ellos, el catalán.
¿Y que hay del resto de los imaginados y deseados únicamente por los pancatalanistas Países Catalanes? No hay problema, se han creado dos páginas web valencianas para que nos faciliten poder disfrutar de lo que es Vivir en Catalán, digo, Valenciano.
En la educación escolar tenemos Federació d'escoles valencianes. Ya en la página uno de la revista Sembra de esta organización, se puede leer lo siguiente:
Som catalanoparlants alfabetitzats en valencià. La nostra catalanitat passa per la valencianització diària de les nostres comarques
Traducción: «Somos catalanoparlantes alfabetizados en valenciano. Nuestra Catalanidad pasa por la valencianización diaria de nuestras comarcas». Por si quedaba alguna duda, ¡¡¿¿Como se puede valencianizar algo valenciano??!!
Y como colofón, se puede observar un extraño fenómeno. Buscamos un enlace (es una lista de noticias, por lo que puede no estar en días posteriores) identificado como «voluntariat pel valencia» y recordamos el logotipo. A continuación vamos al Consorci per a la Normalització Lingüística de Cataluña, y buscamos el enlace «Programa voluntariat per la llengua» y fijémonos en el icono:

Logo del programa de voluntariado en la comunidad Valenciana auspiciado por el FEV
Logo del mismo programa pero OFICIAL de la «Generalitat de Catalunya»
¿Coincidencias? Se recuerda que uno de estos dos programas es oficial de la Generalitat de Catalunya, y el otro aparentemente es una organización independiente situada en la Comunidad Valenciana y para valencianos. Parece que no quieren esperar a resolver la duda de si el valenciano y el catalán son o no lo mismo, y desean asegurarse de que con el tiempo, lo sea. Es interesante fijarse de que en la dirección del enlace de la página de Cataluña, este programa de aprendizaje está pensado, al menos por lo que se puede leer, ¡¡para inmigrantes!!
Y si esto no es suficiente, en el Informe de política lingüística 2004 de la Generalitat de Catalunya sobre inmigración, página 36:
La participació de la societat civil, especialment a partir del programa Voluntaris per la llengua
Así que el programa para aprender valenciano en valencia está relacionado o inspirado en el programa para aprender catalán para inmigrantes en Cataluña ¡¡acaso no dicen que hablamos la misma lengua!!!
Como se suele decir por aquí, «tres cuartos de lo mismo» en valencianisme. En este sitio se puede observar otro fenómeno no tan evidente pero también interesante, el icono o el logo del sitio:
logo de «valencianisme.com»
Esta estrella recuerda a algo... en efecto:
«Senyera» independentista catalana
¿Cuál es la realidad? El gobierno catalán pretende adoptar o lo está haciendo, medidas de intervención en el sector privado y en la sociedad en general, propias de gobiernos totalitarios, no destinadas a mejorar la calidad de la oferta o de los servicios, o a una demanda ciudadana, sino a una imposición lingüística. ¿Por qué? La respuesta puede constar de varios puntos, no excluyentes entre si:
  • Por propia definición, y dada la naturaleza de lo expuesto, se trata de Nacionalismo étnico excluyente y el deseo de desplazar a una lengua no considerada de la etnia.
  • Manifiesta una inseguridad en la capacidad de la lengua autóctona para mantenerse o la certeza de esta incapacidad para lograr el anterior propósito.
Además de esto, y para pretender hacer realidad los inexistentes y carentes de rigor histórico, Países Catalanes como etnia diferenciada, existen organizaciones, presuntamente vinculadas con el gobierno catalán y por lo tanto, infiltradas, para efectuar acciones similares en la Comunidad Valenciana, con el agravante de imponer una lengua normalizada de forma muy diferente a la tradicional y propia lengua valenciana de esta comunidad, y lograr de forma artera y engañosa, disminuir las evidentes diferencias entre esta y la catalana, a tenor de los hechos mostrados.
1ª parte de «Las falacias del nacionalismo incivíco: »

viernes, 13 de enero de 2006

Incongruencias

viernes, 13 de enero de 2006

No hay nada más contrario al espíritu constitucional que hacer una manifestación en la capital de España contra una parte de España, y eso es lo que es, que nadie se llame a engaño

Estado de derecho, democracia y separación de poderes

Foto: 2010 Una odisea del
periodismo
Se puede comprobar que determinados conceptos asumidos como de dominio común, al parecer no lo son tanto, así que esta publicación se dedica para que sean conocidos por los lectores de la bitácora en futuras referencias. Se han escogido aquellos fragmentos que se estima están más relacionados con los conceptos tratados en diversas publicaciones de la bitácora. Proceden de la Wikipedia, cuyos artículos son continuamente revisados y discutidos por gente diversa, como es sabido por el público, y también de un artículo de la UNESCO , obra de un político de reconocimiento internacional (nota: las palabras en negrita son mías):

miércoles, 11 de enero de 2006

Las falacias del nacionalismo incívico (I)

miércoles, 11 de enero de 2006
Comenzamos el año con una serie de artículos sobre el nacionalismo incívico, que se podría considerar como la madre de las manipulaciones. Como se puede comprobar en el enlace de la Wikipedia, en ella no se habla de secesionista a pesar de la evidencia. Es por este motivo por lo que le llamo incívico, en oposición al cívico si explicado en ella y para referirme al resto de nacionalismos no-civícos, también explicados.

Como ciudadano de la Comunidad Valenciana me centraré en el catalanista, por conocerlo y sufrirlo de primera mano, algo más que el resto de españoles. También se ha sufrido el nacionalismo valencianista radical, aunque hoy en día es mas moderado y apenas tiene presencia popular y parlamentaria ninguna, excepto un reciente transfuguismo de un diputado en el parlamento valenciano. La izquierda valenciana es básicamente catalanista, por lo que este está mucho más presente al ser el socialista uno de los partidos mayoritarios (aunque últimamente se puede observar otra tendencia política en este último).

Las falacias características de estas ideologías son entre otras, la acuñada desde esta bitácora como la falacia reciproca y también es muy utilizada la denominada del muñeco de Paja, que consiste básicamente en desacreditar al contrario para de esta forma poder enfrentarse con ventaja.
Para ilustrar estos conceptos observaremos la página antiblavers (en catalán), cuya primera observación a la misma es que es una web anti-algo, lo que denota el nivel de «tolerancia y pluralidad» de la misma. Veamos los siguientes puntos:
  1. Encasillamiento sistemático en el blaverismo ergo anticatalanismo de todo aquel que coincide con alguno de los puntos tratados en esta página, si defiende algún elemento cultural evolucionado, propio e identitario de la Comunidad Valenciana, o si simplemente emite algún tipo de crítica, contra el gobierno catalán o algún concepto prácticamente de cualquier tipo relacionado con Cataluña, despreciando a aquellos automáticamente sin más argumentación que una presentación sesgada y sacada de contexto de los hechos. Resulta de esta forma casi imposible disentir en lo más mínimo de la ideología catalanista sin colocarte la etiqueta despectiva de blavero. Por ejemplo, aquí se comenta que la supuesta rivalidad Valencia/Barcelona es promovida por el gobierno central para su beneficio en contra de Cataluña, sin aportar ningún tipo de prueba válida. La demostración de lo equivocado de esto es que este razonamiento también sería posible hacerlo desde el lado contrario, es decir, que a los intereses pancatalanistas les interesa anexionarse para la causa independentista al pueblo valenciano, con toda probabilidad por su importancia histórica, cultural, geográfica, y económica. Por otro lado, sostiene que la existencia de ciudadanos que desean defender estas peculiaridades del pueblo valenciano, se debe a la voluntad y a la manipulación del mencionado gobierno central simplemente por defender sus ideas, y una vez más exactamente el mismo razonamiento se podría aplicar para sospechar que es el catalanismo secesionista el que se está inventando todos estos conceptos para autojustificarse, reduciéndose todo al absurdo. La cuestión es que puestos a especular, hay motivos para pesar que pueda haber algo de cierto tanto en una parte como en la otra, pero en todo caso no debe ser óbice para encasillar a cualquiera e inhabilitarle para poder tener opinión propia. A continuación se proporcionan unos enlaces que pretender dar veracidad a lo que se defiende pero que en realidad no valen absolutamente para nada (podríamos hablar de falacia vacía, también de esta bitácora). Todo esto lo veremos más adelante.
  2. Xenofobia y exclusión cultural. En Blasco Ibáñez en Antiblavers se cuenta como Blasco Ibáñez, uno de los principales escritores españoles de todos los tiempos, no quería a su tierra... ¡porque escribía en español!!. También se duda de la capacidad para defender, no ya a la Comunidad Valenciana, sino simplemente cualquier postura sobre el tema cultural lingüístico, invalidando la capacidad de opinar debido a su lugar de procedencia o filiación política, lo que demuestra el alto grado de manipulación política introducida, además de un fuerte sectarismo.
  3. Acusaciones de violencia infundadas, relacionando estás ideologías regionalistas con actos realizados por grupos radicales, una vez más, dando como única prueba que estos grupos tienen en sus idearios conceptos coincidentes en cuanto a las señas de identidad. Sin embargo, esto es lo que hay.
  4. Politización e intromisión profunda en la sociedad. Intento descabellado de relacionar al Valencia C.F. con este movimiento, al parecer, por modificar el color blanco del fondo de una pequeña franja del escudo del equipo por otra de color azul, o por la organización por parte de los aficionados de un gigantesco mural con la bandera oficial de la Comunidad Valenciana, y no seguir las correctas proporciones. En todo caso es interesante indicar que el elegir un determinado símbolo, o el aceptar uno en concreto, es un problema de los afectados, sea aficionados del VCF para su equipo o de los ciudadanos de la CV para sus símbolos oficiales, y en principio, este hecho no tiene porque molestar a nadie. Cosas muy distintas son las que se tienen que observar en otros estadios de futbol.
Fuentes de información y enlaces relacionados:
  • Para extrapolar esta información, en la bitácora Criterio se recopilan referencias de artículos de prensa donde se comentan la actitudes y comentarios de los miembros del gobierno y del aparato pancatalanista, para poder establecer analogías con esta web. Se podrá observar como sistemáticamente se etiqueta de anticatalán o de sentir catalanofobía a todo aquel que discrepa en cualquier punto respecto de los sus postulados. Óbviense (a juicio del lector) el resto de comentarios y opiniones vertidos en la bitácora enlazada (Criterio), los cuales tendrán una relación anecdótica con este artículo.
  • Diarío Avui y uno de sus colaboradores, Salvador Sostres (enlace de Periodista Digital, con la versión traducida)
¿Cuál es la realidad? El nacionalismo catalán necesita del importantísimo patrimonio cultural, humano y económico de la Comunidad Valenciana, y no se arriesga a esperar que los ciudadanos de dicha comunidad deseen de forma natural la pertenencia y subordinación al mismo. Esto ha provocado acciones y reacciones de rechazo en ambas comunidades así como del gobierno central, en una disputa por la identidad del pueblo valenciano ajena a este último, con la diferencia de que desde el pancatalanismo se incluye y considera como enemigo a todo aquel que defiende las señas de identidad tradicionales y cualquier elemento propio cultural de la CV, asociándolo a un movimiento radical postfranquista, prácticamente inexistente, al menos en su forma original.
Para lograr todo esto utilizan una estrategia agresiva consistente en acusar al resto de lo que hace el propio pancatalanismo, con la intención de ocultar, enmascarar o justificar sus acciones, confesándolas de esta forma. Estas son, entre otras que veremos en próximos capítulos:
  1. Actos violentos como medios de lucha contra opiniones diferentes.
  2. Desacreditación, mofa, difamación de aquellos que no promulgan con el perfil ideológico/cultural adecuado.
  3. Fuerte sectarismo
  4. Xenofobia
2ª parte de «Las falacias del nacionalismo incivíco: ¡Vive en churranés!»