Los que pagan, y los que cobran del estado escogidos por los políticos. Productoras que han creado su negocio gracias al dinero de los ciudadanos, más aún ahora que se ha eliminado la financiación por publicidad. ¡Viva la igualdad!:
Visto en el Blog de Alternativa Sindical
Actualización 08/07/2023:
Resumen de la situación de entonces: Zapatero cambió la manera de financiar y de dirigir la entidad pública de televisión española de manera que los ingresos por publicidad fueron suprimidos y el gasto pasó a ser enteramente público. También cambió la manera de dirigir dicho ente informativo siendo necesarias mayorías amplias en el Congreso, lo que implicaba al resto de formaciones políticas. Si bien parte de estas medidas parecían necesarias y debían haberse acometido mucho antes, también es cierto que lo que antes se hacía en producciones propias, pasó a depender de productoras privadas externas que cobraban de las arcas públicas para dotar de contenidos a TVE. Adicionalmente, aparecieron con sorpresa nuevos canales de televisión de clara y más que evidente afinidad ideológica con el partido gobernante, como La Sexta o La Cuatro. En definitiva, TVE se convirtió en un canal eminentemente informativo algo más objetivo que en legislaturas anteriores, a costa de aumentar desproporcionadamente su gasto, con la añadidura de que parte de ese dinero iba a parar a entidades subcontratadas privadas que poco ofrecían a la audiencia. El movimiento clave consistió en ceder el protagonismo mediático así como articular la mediatización de la sociedad achacada anteriormente al órgano público, a los nuevos canales privados, licencias concedidas desde el poder y con escasa objetividad, con el claro protagonista de Iñaqui Gabilondo, el de los «suicidas en pijama» inexistentes. Un fenómeno inesperado fue el de la aparición en los recientes canales de TDT como reacción al movimiento ejecutado desde el poder, de medios de corte extremadamente conservador como Intereconomía como principal exponente.
NOTA: el gobierno posterior de Mariano Rajoy rechazó la reforma de Zapatero, sin que parezca que haya mejorado nada respecto a la independencia y la objetividad del medio. Más bien al contrario.
Ojo tener un medio digital+ aunque no quieras eh?, con lo que me gustan a mí los anuncios (de verdad me gustan).
ResponderEliminar¡jA, JA! si es verdad, en comparación con algunas series y otros programillas los anuncios se agradecían.
ResponderEliminarEn serio, si la TVE no era un negocio como tal, no significa que no tengan que tener publicidad. La cuestión es esa, que tenemos que costear un canal de pago por narices, lo veamos o no. Es lamentable.
La publicidad es un medio tan digno como otro cualquiera para costear una empresa, sea publica o privada. Otra cosa son los criterios para que esa publicidad en función de la audiencia se tomen. Es decir, qué tipo de programas eran los que debían dar a ese pago por publicidad un valor determinado. El ingreso por publicidad podría ser la mitad, pero no cero como ahora.
Y luego está el tema de las productoras de los «amigos»
En fin