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jueves, 2 de junio de 2016

La era post-correo

jueves, 2 de junio de 2016

Se habla de la llamada era post-PC en la que se considera a este una especie de dinosaurio a punto de extinguirse. La revolución de los dispositivos móviles y la creación de un mercado de servicios, ha eclipsado el que hasta hace pocos años era la principal fuente de ingresos en el ámbito de la informática. Las cifras empequeñecen la relevancia de un dispositivo que ha sido fundamental en la construcción de la sociedad del conocimiento actual. Pero ¿son los fríos números y las abultadas cifras suficiente evidencia como para mostrar lo que ocurre? ¿Está sufriendo realmente el PC? ¿Está siendo olvidado? Probablemente no.

El pistoletazo de salida de la dinámica del mercado tecnológico actual vino con el iPod de Apple, cuyo verdadero negocio fue —es— la venta de canciones en línea. Se consolidó definitivamente con el iPhone, un terminal móvil que requería necesariamente de una tarifa plana de comunicaciones. Las necesidades de marketing disfrazaron de revolución tecnológica aquel momento, pero como se ha comentado en otra ocasión, de lo que se trató realmente fue de revolución comercial. Así es como se ha de llamar a aprovechar una tecnología existente y convertirla en un producto de consumo distinto. La clave de aquel entonces fue precisamente no competir con con el gigante Microsoft, líder indiscutible del mercado tecnológico, huyendo de los PC de escritorio. Había que inventarse un mercado nuevo, y este llego con «la nube». Todo es historia a partir de aquel momento, y la jugada no cabe duda de que les ha salido a la perfección. Microsoft ha intentado subirse al carro con su Windows Phone, pero lo ha hecho sin ganas. Tan pocas que ha admitido su fracaso, sumándose a otras victimas como Blackberry, marcas que dominaban el mercado corporativo. Pero en el caso del gigante de Redmon, ha sabido reconducir su camino contraatacando con una evolución del PC como son las Surface. Unas tablet con capacidad de computador portátil. Pero volviendo a la pregunta ¿ha quedado desterrado el PC? Para contestar a esta pregunta hay que hacerse otra: ¿en qué dispositivo se programan las aplicaciones que llevan todos nuestros dispositivos móviles? Pongo la mano en el fuego, y no me la quemaría, a que lo que sostiene verdaderamente todo el mercado tecnológico continua siendo el viejo y buen PC de escritorio de toda la vida, sinónimo de trabajo, estudio, desarrollo e innovación. Todo parece indicar que si bien el mercado móvil ha alejado al PC de los focos y de la fama, sin embargo, lo ha convertido en un imprescindible tras las bambalinas. Lejos de matarlo, le ha convertido en inmortal.

Junto a este escenario ha surgido de forma paralela el fenómeno de las redes sociales y la mensajería instantánea, productos que no tendrían sentido sin la necesaria revolución de las telecomunicaciones, que trajo consigo la necesidad de las tarifas planas de datos. De forma similar a lo que ha ocurrido con el PC, ha pasado con el correo-electrónico. La omnipresencia del Whatsapp o del Facebook ha generado la falsa impresión de que el clásico correo-e de siempre ha quedado obsoleto, ahogado entre miles de intrascendentes chismorreos, selfies y otras poco edificantes muestras de exhibicionismo. Pero tal vez lo que ocurre es que el usuario habitual de estos productos no lo era del correo. O al menos, no era un usuario que le diera un uso adecuado, yendo a caer en «La Red Social». Puede decirse por tanto que el correo electrónico continua gozando de una estupenda salud, con todo tipo de aplicaciones clientes y servicios de suscripción. Entre ellos, el ya visto de MailRelay. Así que tal vez sea esta una era post-correo, en el que paradójicamente al igual que ocurre con su compañero el PC de escritorio, están más vivos que nunca.


domingo, 17 de enero de 2016

Safe Harbor y el email marketing

domingo, 17 de enero de 2016

Este enero se cumple el plazo de la decisión de la Unión Europea por la que se anula el acuerdo de transferencia de datos con EEUU vigente desde 1998. Este acuerdo —«Safe Harbour» (Puerto Seguro)— consistía en que este país era considerado seguro por la vieja Europa, pero tras todo lo revelado por el conocido Edward Snowden, ha dejado de serlo. Todo empezó en Irlanda, donde el ciudadano austriaco Max Schrems denunció que el uso de los datos personales de usuarios de la Unión Europea en los EEUU ponía en riesgo la privacidad de los mismos.

Debido a esta medida, los datos de los usuarios europeos que manejan estas empresas para ofrecer sus servicios no pueden ser transferidos a servidores en su país de origen. Por parte de estas empresas, implica que han debido adaptar sus sistemas a la nueva situación. Por parte de los usuarios y empresas europeas que hacen uso de sus servicios implica asegurarse que los datos de los clientes cumplen con el Safe Harbor, que como se ha explicado no se cumple para estas empresas salvo que sea acreditado.

En estos momentos un gran número de empresas del país norteamericano están en manos de los estados europeos. Google, Apple y Microsoft ya han sufrido en alguna ocasión las decisiones de los tribunales de justicia del viejo continente, y ahora les toca el turno —además de las mencionadas— a aproximadamente otras 4500 empresas norteamericanas que operan en Europa debido a la decisión tomada el año pasado por el Tribunal de Justicia de este continente. Entre estas empresas se encuentra el conocido servicio de marketing por correo electrónico MailChimp.

El gobierno de los EEUU está dando asistencia a las empresas de su país para que puedan continuar ofreciendo sus servicios en nuestro continente. No obstante, tal vez sea un buen momento para considerar otras opciones. Recientemente he recibido por correo información sobre el servicio de marketing por correo Mailrelay —del que ya se habló en otra ocasión—. En su comunicado proporcionan información importante sobre cómo eludir todos estos inconvenientes sin más que usar su servicios, ya que sus servidores cumplen 100% el requerimiento del Safe Harbor al operar todos en la Unión Europea. La oferta anuncia las siguientes ventajas:
  1. 6 meses gratis al pasar de Mailchimp a Mailrelay: aunque el servicio gratuito cumple las expectativas de la mayoría, ofrecen 6 meses gratis para ofrecer cobertura completa al pasar de un servicio a otro.
  2. Evitar problemas legales: para evitar que algún problema legal relacionado con el cumplimiento del Safe Harbour afecte al servicio de email marketing de tu proyecto, Mailrelai ofrece una guía paso por paso para efectuar la migración desde Mailchimp.
  3. Nueva interfaz: simple, moderna, fácil de usar y cumple con lo necesario desde el primer momento.
  4. En general, la empresa se puede calificar como el mejor servicio de email marketing en España por su adaptabilidad y constante evolución, además del resto de características que ofrece como listas, autorespondedores, formularios de inscripción, idioma, soporte técnico, etc.
Es una buena opción a tener en cuenta. Para más información puedes consultar sus manuales y el siguiente vídeo:



miércoles, 28 de octubre de 2015

El email marketing en el mundo del Whatsapp

miércoles, 28 de octubre de 2015
Los 7 aspectos clave del éxito en email marketing [eBook]
¿Tienes una empresa y no te aclaras con la promoción? ¿Vives angustiado a expensas de los vaivenes del mercado? ¿Deseas dejar de tener un papel pasivo en tu futuro? Hoy en día, en esta época de carencias económicas, tal vez no veamos otras posibilidades que un mundo conectado nos brinda. Una de ellas puede ser la utilización del correo electrónico. El ahora ya clásico medio de comunicación, continúa —a pesar de todo— todavía vigente y puede ser utilizado para llegar a un público más amplio o mejorar la comunicación con ellos.

Para serles sincero, no soy quien para hablar con autoridad de marketing como vendedor o empresario, pero sin duda que sí puedo hacerlo como consumidor o usuario. Como tal, puede decirse que la popularidad de las redes sociales y los sistemas de mensajería instantánea es cada vez mayor. Que surjan nuevas formas de comunicarse es tan inevitable como conveniente. También se oye comentar que se ha llegado a la era Post-PC, y hay quien habla de su desaparición. Sería un tema que podría dar para un artículo dedicado, pero de lo que se trata en realidad es que ahora, a cada herramienta se le dota de un uso más específico, acorde a su verdadera naturaleza. 

Con el correo está ocurriendo algo parecido. La mensajería instantánea en lugar de ser lo que acabe con el correo electrónico, puede que sea lo que lo está convirtiendo en la herramienta seria y útil que nunca tuvo que dejar de ser, no solo en entornos corporativos sino también en la comunicación con los clientes. Gracias al Whatsapp se acabaron aquellos montones de correos con Power Point de dudoso gusto y menor utilidad. Es sin duda, la hora del correo electrónico.

Ahora bien, ¿por dónde empezamos? Recientemente ha llegado a mis manos —por correo electrónico, claro— una herramienta que promete ser muy interesante. Atrae desde un primer momento por su carácter de suscripción gratuita y por proporcionarnos, gracias a diversos manuales y vídeos de gran valor formativo, un valor añadido. Esta herramienta es Mailrelay y puedes acceder a dichos contenidos en su sección de manuales sobre email marketing.

Los manuales están en formato ebook, siendo el más reciente de ellos el que lleva el título Los 7 aspectos clave del éxito en email marketing. Hay varias opciones de descarga —entre ellas la descarga directa— pero si deseas estar al tanto de las novedades lo mejor es la suscripción —naturalmente, por correo electrónico— a su blog. Creo que es una buena oportunidad para empezar




miércoles, 4 de junio de 2014

La evolución del comercio electrónico

miércoles, 4 de junio de 2014
Foto: flickr
¿Cómo era la sociedad hace 30 años? La revolución de las nuevas tecnologías junto a la aparición de nuevos dispositivos portátiles y la mejora en las telecomunicaciones, ha provocado una sucesión de cambios graduales en los últimos veinte años que pueden resultar imperceptibles, pero que han modificado sensiblemente nuestra realidad cotidiana.

Inicialmente Google era tan sólo un motor de búsqueda innovador, pero se ha convertido en un gestor monstruoso y globalizado que maneja cantidades de información que hasta hace poco se hubiera considerado ciencia-ficción, y además, disponible para cualquier usuario: geolocalización, digitalización de documentos, robótica, automatismos, almacenamiento en la nube, blogs, vídeos, música, y en continúo desarrollo de nuevas áreas de investigación.

Las redes sociales comenzaron tímidamente, pero han acabado siendo el paradigma básico en nuestra forma de comunicarnos. No solo a través de las nuevas tecnologías, sino también sustituyendo en algunos casos a la comunicación personal. Medios de comunicación, políticos, empresas, la práctica totalidad de la sociedad está pendiente del último trendig topic.

Sin embargo, un área que siempre ha estado ahí pero que no ha experimentado aparentemente grandes cambios —hasta hace poco— es la del comercio electrónico. Esta forma de comercio existe desde los años setenta —sus orígenes son aún anteriores— en forma de «venta por catálogo». Con el desarrollo de Internet, se trasladó dicho modelo al nuevo medio sin más que publicar el catálogo en una página web. La burbuja de las «punto.com» de finales del S.XX apagó aquel inicial entusiasmo.

La empresa española Weblisten sorprendió a finales de siglo con un nuevo modelo de distribución y venta de música, pero el entorno político y empresarial no estaba preparado. Fue cancelada por decisión judicial. Sin embargo, pocos años después Steve Jobs abría iTunes, que era lo mismo salvo que tenía el beneplácito de la industria musical y que se le añadía el importante «gancho» del iPod primero, y del iPhone después. En estas tiendas el usuario seleccionaba lo que deseaba desde su hogar o desde su dispositivo portátil, y se lo descargaba al instante, previo pago por algún método electrónico. En este campo surgió Paypal, un sistema intermediario por el que con tan sólo proporcionar un correo electrónico es posible enviar y recibir pagos, sin que sea necesario facilitar datos bancarios, más que a la propia empresa gestora de la transacción. Otro sistema similar surgido como competencia es el Google Wallet.

La tienda Amazon se ha convertido en un gigante de referencia no sólo del comercio electrónico, sino del comercio global a todos los niveles. Desde China, la superpotencia económica, está surgiendo con fuerza la competencia con AliBaba  —el nombre no me inspira confianza, pero ellos sabrán—. Otros casos son por ejemplo TMart, Deal Xtreme o Asia Pads.

Tras estos acontecimientos, la rutina de «irse de compras» por medios electrónicos, con todo lo que ello conlleva —es decir, pago incluido— comenzaba a formar parte de lo habitual. El siguiente paso era la fusión del concepto de «red social» con el del mundo comercial. Es decir, una red formada por usuarios que realizan intercambios comerciales entre ellos: esto es lo mismo que decir EBay, SegundaMano, Mil Anuncios, etc., —por supuesto, también hay quien abre su propio e-comercio—.

Esta autogestión del comercio de productos se está extendiendo a ámbitos diversos. En la literatura, por ejemplo, los autores noveles —principalmente— comienzan a editar, publicar e incluso vender de forma electrónica sus propias obras. Ejemplos de ello son Bubok, Lulu o Byeink.

¿Que es lo que falta por completar este escenario? ¿Cuál es el eslabón que no se ha mencionado, que puede ser el siguiente paso evolutivo del comercio electrónico?: el transporte de mercancías.

Amazon sorprendió al mundo con la noticia de que ella misma iba a gestionar el envío y transporte de mercancías directamente a los compradores mediante drones automáticos que por geolocalización acudirían a puntos de entrega previstos. La también mencionada Alibaba notifica que ha invertido en una compañía de correos de Singapur, con la intención de expandirse al resto del mundo.

Estas soluciones pueden ser válidas para las grandes empresas, pero los usuarios de a pie, hemos de acudir a las compañías de correos y mensajería habituales. Como respuesta, estas ponen cada vez más facilidades para que cualquier usuario con una simple llamada telefónica o rellenando un formulario en la web, pueda enviar de vivienda a vivienda un determinado producto.

Pero, ¿qué compañía escoger entre toda la cada vez mayor oferta?. La start-up española Packlink ofrece una solución con un comparador de empresas de mensajería.

Con tan sólo introducir origen, destino y dimensiones del paquete a enviar, el servicio selecciona y muestra las posibles empresas de mensajería que pueden satisfacer el pedido configurado, indicando datos relevantes como precio y tiempo de transporte. El sistema gestiona además todo el proceso con la empresa seleccionada, desde el formulario de pedido hasta el pago correspondiente. Se trata pues de un gestor de pedidos de envío completo.

Y esto seguramente, es sólo el principio de lo que ha de venir.